La Mtra. Norma Ochoa García y la Psic. Gabriela Susana Mercado (USAER) de la escuela Avelino Bolaños narran su experiencia en la aplicación de la Ficha 112
“Al inicio los alumnos y alumnas se sorprendían de que algunos de
sus compañeros y compañeras tuvieran una tarjeta que decía “reservado”. Posteriormente, conforme
fue transcurriendo el juego, los equipos se ayudaban entre sí para que sus
integrantes tuvieran un lugar”.
“Al finalizar el juego se reflexionó
sobre la actividad. Comentaron que no era justo que algunos tuvieran pase de
reservado, que era un privilegio y eso no era justo. Otros opinaron que estuvo bien
que una compañera tuviera pase de reservado ya que ella tiene una discapacidad
motora y así no tendría que preocuparse por un lugar. Que en esas
situaciones convenía que se reservara lugares para personas con discapacidad o mujeres
embarazadas.
También observaron que quienes ya
tenían un pase de reservado no hacían ningún esfuerzo por ganar una silla”.
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